por VANDERLEI TENÓRIO*
La mejor práctica en una obra de teatro es actuar en las circunstancias dadas.
Konstantin Stanislavski es una parte indispensable de la historia de las artes escénicas. Durante su vida, recibió elogios por su trabajo como actor y director, pero el enfoque central de su legado es el sistema que diseñó para los actores.
En 1906, el grupo Teatro de Arte de Moscú Hicieron su primera gira europea y resultó ser un gran éxito. Sin embargo, también provocó una crisis muy seria en la mente de Stanislavski porque le hizo ver que la mayor parte de su interpretación era "mecánica". A pesar de sus mejores esfuerzos, estaba ofreciendo actuaciones completamente desprovistas de cualquier respaldo emocional real.
Para resolver esto, Stanislavski se embarcó en un viaje que pronto se convertiría en el trabajo de su vida. En lugar de ver sus futuras producciones como proyectos separados, comenzó a verlos como una serie de experimentos necesarios para avanzar en su investigación sobre las maquinaciones de la mente de un actor. Muchas personas a su alrededor no entendían lo que estaba haciendo y lo criticaron por restar importancia a la autoridad del director, dejando que el actor tomara la delantera en la acción.
Los experimentos que llevó a cabo pronto formarían la base de una escuela coherente de actuación que se conocería como el Sistema Stanislavski. Señaló que era increíblemente importante para los actores dominar "el arte de experimentar", afirmando que un actor solo puede activar todo su potencial si elige usar su voluntad para acceder a sus sentimientos subconscientes y encontrar justificaciones emocionales para sus acciones en el escenario.
Las justificaciones antes mencionadas también debían tener paralelos dentro del guión, algo que Stanislavski llamó "circunstancias dadas". Pidió a los actores que estudiaran a fondo la dinámica de los personajes que interpretarían, formando una comprensión clara de su trasfondo emocional, así como de las razones detrás de sus reacciones en el guión. Él sostuvo: "El mejor análisis de una obra de teatro es actuar en las circunstancias dadas".
En opinión de Rusia, las "circunstancias dadas" se dividieron en externas e internas. Las circunstancias externas (la disposición material que lo rodea) e internas del personaje ayudan a crear un estado de ánimo y mantienen al actor enfocado en el núcleo del personaje. En esto, para acceder al inconsciente del personaje y despertar emociones, el actor debe hacer uso de la imaginación, en palabras del teórico, “el arte es un producto de la imaginación”.
lo llamó“la magia si" y explicó que dejar que el actor llegue a las conclusiones lógicas de sus personajes sería el ejercicio perfecto para comprender los mecanismos de la psique humana. Según él, era deber del actor descubrir el propósito existencial del personaje, es decir, las tareas que debe resolver o las metas que debe alcanzar dentro del ámbito de la obra.
El segundo concepto decisivo de su método es el de “acción”. El teórico ruso creía que la acción conducía a una emoción, es decir, a partir de la experiencia física se genera un sentimiento, y no al revés. Por ello, su método incluía diversas prácticas físicas que podían ayudar al actor a despertar la emoción del personaje, como técnicas de relajación física y vocal.
El tercer concepto fue “propósito”. Para el teórico, era importante dar sentido a todas y cada una de las acciones o sentimientos del personaje. De por sí, esto ayudaría a mantener al actor y al director enfocados, sin caer en clichés y acciones innecesarias para el desarrollo escénico.
En consecuencia, su método riguroso fue un gran avance para el mundo de la actuación, pero pronto se recomendaron desarrollos interesantes en su sistema, siendo el más notable la pregunta de Yevgeny Vakhtangov: “¿Qué motivaría al actor a comportarse como se comporta el personaje?”. Esto se consideró una mejora práctica a la sugerencia de Stanislavski de que el actor debería concentrarse completamente en el personaje, negándose a sí mismo.
Estas ideas encontraron una nueva perspectiva en los Estados Unidos cuando pioneros como Sanford Meisner, Stella Adler y Lee Strasberg comenzaron la reconfiguración de lo que ahora se conoce como el "Método". Adler entrenó a artistas emergentes que se convirtieron en los íconos de actuación de método más definitivos del siglo XX, incluidos Marlon Brando y Robert De Niro.
Debido al conflicto inherente entre las operaciones autoritarias de un actor y la necesidad de un control total del director, directores como Alfred Hitchcock criticaron a menudo a los actores de método.
Si bien las reflexiones de Konstantin Stanislavski eran de naturaleza teórica, muchos actores decidieron que sería mejor asumir papeles si primero tenían una experiencia similar, lo que llevó a De Niro a conducir por Nueva York en un taxi antes de protagonizar Taxi Driver, Jack Nicholson realizando sesiones de electroshock real por su papel en Volando sobre un nido de cuco y Daniel Day-Lewis rompiéndose dos costillas para interpretar a un personaje paralizado en mi pie izquierdo – un papel que le valió un Oscar al mejor actor.
Por lo general, los problemas ocurren cuando algunos actores lo llevan a niveles irritantes, lo que llevó a John Cassavetes a declarar que el método de actuación era "más una forma de psicoterapia que de actuación" y que era irremediablemente pretencioso y autocomplaciente.
A pesar de esto, se acepta que Konstantin Stanislavski hizo un gran avance en más de un siglo con su sistema bellamente construido. Para los curiosos, el método de Stanislavski está recogido en las obras: mi vida en el arte (1924) Un actor se prepara (1938) El trabajo de un actor sobre sí mismo (1938) Construyendo un personaje (1950) y crear un papel (1961).
*Vanderlei Tenorio es periodista y estudia geografía en la Universidad Federal de Alagoas (UFAL).