Marx: ciencia y revolución

Imagen: Annika Elisabeth von Hausswolff
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por PIMIENTO ALEXANDRE MARINHO*

Reseña de la edición española del libro de Márcio Bilharinho Naves

Editado y prólogo de Pedro Karczmarczyk, profesor de la universidad nacional de la plata, el libro Marx: ciencia y revolución, de Márcio Bilharinho Naves, finalmente obtuvo una versión en español, haciéndola más accesible al público latinoamericano. Lanzada hace más de 20 años en Brasil, esta obra del profesor jubilado de la Universidad Estadual de Campinas se destaca por su precisión y didáctica, siendo una puerta de entrada a las obras de Marx y Engels,[i] Marxismo y política comunista.

Márcio Bilharinho Naves se consagró como uno de los principales especialistas brasileños en el marxismo jurídico y en la obra de Evgeni Pachukanis, jurista soviético. En su trayectoria académica y política, escribió, tradujo y organizó varias publicaciones marxistas en Brasil, con una influencia inequívoca de las posiciones althusserianas.

El subtítulo “ciencia y revolución” indica sucintamente los fundamentos de la reflexión marxista de Naves: la defensa del carácter científico del marxismo, constituido a partir de la lucha contra las teorías e ideologías burguesas; y la ratificación de su aspecto irreductiblemente revolucionario, frente a los diversos intentos de desvincularlo de la perspectiva comunista. Siendo así, Marx: ciencia y revolución revela la dirección en la que Naves desarrolla sus esfuerzos teóricos al mismo tiempo que propone un análisis de los fundamentos del pensamiento marxista. Después de todo, no hay forma de discutir esta teoría sin tomar partido, incluso frente a las polémicas que la constituyen.

Marx: ciencia y revolución Se estructura en torno a siete capítulos que buscan reconstruir la obra de Marx y realizar una genealogía del campo teórico y político inaugurado por ella: el marxismo. Más precisamente, el paso de un Marx “premarxista” a un Marx “marxista”; la transformación epistemológica y política operada en este pensador, a través de sus descubrimientos y encuentros teóricos y políticos.

¿Desde qué caminos pudo Marx constituir un campo teórico que haga posible que el proletariado esté presente en la teoría, como dice Balibar (1975)? Esto es lo que reconstituye la investigación de Naves en sus hechos más importantes: “tu pasado ideológico” (NAVES, 2020, p. 65) entre el liberalismo, el hegelianismo y el feuerbachianismo hasta el materialismo histórico más desarrollado en La capital, pasando por obras de ruptura materialista y comunista como la ideología alemana y el manifiesto Comunista y por las lecciones aprendidas del movimiento obrero revolucionario de la época.

Al oponer al Marx joven y al viejo, como propone la lectura althusseriana, y al demostrar las mutaciones conceptuales a lo largo de la vida de Marx, Naves escapa a una unidad ilusoria del pensamiento marxista por el simple hecho de que proviene de la misma persona. Así, el autor también se libera de la fijación con los orígenes de este pensamiento, como si revelaran la “esencia” de toda la obra de Marx. El interés de Naves es, por el contrario, destacar los descubrimientos científicos más avanzados de Marx, los puntos más altos posibles de su trayectoria, formada por un proceso teórico y político intenso y conflictivo. Puntos sobre los que podemos y debemos desarrollar el marxismo, como instrumento revolucionario, y no como contenido de exégesis infinita.

Como demuestra Naves, especialmente en los capítulos 6 (La refundación del materialismo histórico) Y 7 (La superación de la sociedad burguesa: transición y comunismo), a través de continuos recortes y rectificaciones, Marx llegó a ciertas tesis y conceptos fundamentales para la ciencia y la lucha proletaria. La primacía de las relaciones de producción sobre las fuerzas productivas y la determinación económica sólo en última instancia son dos descubrimientos de la mayor importancia.

Aportan mayor complejidad a la ciencia histórica marxista, destacando la lucha de clases como motor de la historia y oponiéndose al economicismo más simplista ya la tesis de la neutralidad de las fuerzas productivas. Al mismo tiempo, señalan los pilares políticos para la transición al comunismo: la transformación de las relaciones de producción, además de la expropiación y nacionalización de los medios de producción, y la destrucción del Estado burgués, además de la toma del Estado. fuerza.

Los argumentos de Naves sobre la transición generan un impresionante contrapunto a las contorsiones de los defensores de un supuesto “socialismo con peculiaridades chinas” hoy, por ejemplo. Sin embargo, a nuestro juicio, al buscar una definición marxista rigurosa del socialismo, basada en la obra de Marx y en la experiencia del movimiento obrero del siglo XIX, Naves desconoce el alcance real de las revoluciones del siglo XX, al afirmar que “nunca otorgaron franquicias a los puntos de referencia del capitalismo” (NAVES, 2020, p. 186), incurriendo así en una cierta rigidez doctrinal que deja de lado el contradictorio proceso histórico.

Ahora bien, a diferencia de lo que sucede en la China capitalista en las últimas décadas, donde cada vez hay más privatizaciones de los medios de producción, reforzamiento de la desigualdad de clases y de ingresos y un inmenso aparato de Estado sin control de las masas, es decir, donde no hay indicios de destrucción. de las relaciones de producción capitalistas y su Estado, varias revoluciones del siglo XX, incluida la china, presentaron procesos de transición socialista durante un período determinado.

Procesos limitados, sin duda, con la permanencia de las relaciones de producción capitalista y con la supervivencia de los aparatos del viejo Estado. Limitadas, pero existentes, como expresiones de la lucha de clases posterior a la toma del poder que desafió y en algunos puntos cruzó, por primera vez en la historia, los hitos del capitalismo.

Esta posición menos rígida, pero no menos rigurosa, parece ser la propia de Naves en otras intervenciones. Por ejemplo, al analizar las medidas contradictorias de los primeros años de la revolución rusa, el autor argumenta que “el proceso revolucionario aún estaba en curso, que aún no se había agotado, y que la clase obrera y las masas en su conjunto no habían pero sufrió una derrota irreversible” (NAVES, 2005a, p. 61). En su análisis de la revolución china, también identifica en los acontecimientos de la revolución cultural elementos de “ruptura del estado burgués” y “cooperación libre de la masa trabajadora” (NAVES, 2021, p. 615). Revolución que en otra ocasión considera, aunque parcial, restringida y luego derrotada, un “esfuerzo fundamental para revolucionar las relaciones de producción” (NAVES, 2005b, p. 98).

El capitalismo restaurado hoy, donde antes hubo un esfuerzo de transición socialista, no puede borrar las heroicas iniciativas y intentos de los revolucionarios y las clases explotadas del siglo pasado, contra todas las adversidades posibles. De las insuficiencias y fortalezas de estos logros, se hace posible hoy conspirar, desde un nivel superior, en un mundo nuevo sin explotación. Como continúa Naves: “es a partir de Mao y la Revolución Cultural –sobre todo sus carencias– que es posible elaborar conceptualmente la transición y trazar una estrategia para la superación efectiva del capital. Sin esto, sin esta condición esencial, el socialismo legal[ii] siempre triunfará sobre el marxismo y el proceso del capital nunca se interrumpirá” (NAVES, 2005b, p. 109). Los monopolios capitalistas chinos y sus multimillonarios lo dicen.[iii]

*Alexandre Marinho Pimienta Magíster en Sociología por la Universidad de Brasilia (UnB).

Publicado originalmente en el blog marxismo21.org.

 

referencia


Márcio Bilharinho Naves, Marx: ciencia y revolución. Santiago de Chile: Editorial Doble Ciencia, 2020.

 

Bibliografía


BALIBAR, E. Cinco estudios sobre materialismo histórico. Lisboa: Editorial Presença, 1975.

MASCARO, AL Márcio Bilharinho Naves, pensador del marxismo jurídico. Ley y Realidad, v. 1, no. 1, 2011.

NAVES, MB La Comuna de París en la Revolución Cultural China. En: MARTINS, CB; BATISTA, FR; SEFERIÁN, G. (Org.). Comuna de París, Estado y Derecho. Belo Horizonte: RTM, 2021.

____. Mao, el proceso de revolución. São Paulo: Brasiliense, 2005b.

____. ____. Estalinismo y capitalismo. En: ___ (Org.). Análisis marxista de la transición. Campinas: UNICAMP, 2005a.

Notas

[i] A pesar de que el título se refiere únicamente a Marx, Engels está obviamente presente en las obras analizadas por Naves a lo largo del libro, pero no es citado por “conveniencia de exhibición” (NAVES, 2020, p. 39). Por la misma razón, no nos referiremos a Engels en esta reseña.

[ii] Expresión que indica la influencia de las ilusiones jurídicas burguesas en el movimiento socialista. Naves entiende el socialismo jurídico como una ideología opuesta al marxismo, en tanto traslada la transición real al comunismo al terreno de los cambios en el ámbito del Estado y del derecho.

[iii] Gracias por la lectura crítica de Danilo Enrico Martuscelli.

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