De Atenas a Jerusalén y más allá

Whatsapp
Facebook
Twitter
Instagram
Telegram

por OLGARIA MATOS*

Consideraciones sobre la filosofía brasileña.

Hay una filosofía brasileña porque, sobre todo, hay filosofía en Brasil, como en todos los tiempos y lugares donde se plantea la cuestión de nuestra finitud y vulnerabilidad.[i] Una pregunta propiamente sin respuesta, se planteó por primera vez en el idioma griego como filosofía, “amor a la sabiduría”, no sabiduría, no posesión” de un conocimiento un sabio, sino interrogación de aquellos que la buscan – con asombro (tauma) y también terror (trauma)-, porque no lo tiene. La etimología como memoria de la palabra revela que toda filosofía es, en cierto modo, “griega”. Qué significa decir “mestizo”, un cruce de oriente y occidente, profano y sagrado, razón y mitología, de diferentes historias, culturas y temporalidades.

La filosofía existe en Brasil porque hay una lectura filosófica de la historia de la filosofía, de sus autores, de sus interrogantes y de la cultura que habitaron y habitan, cuestionada desde esa herencia, como semióforos: “[semióforo] es un signo llevado al frente o empuñado para indicar algo que significa otra cosa y cuyo valor no se mide por su materialidad sino por su fuerza simbólica”.[ii]

Si la Filosofía es la Historia de la Filosofía, es porque se trata de una tradición, de una transmisión. Si es posible para la Física contemporánea interpretar el fenómeno del arco iris a nivel atómico, prescindiendo de la historia de su problema, sin referirse a Aristóteles, Newton, Goethe o Schopenhauer, ¿qué sería de la Filosofía sin su Historia? Porque si, como escribió Walter Benjamin, es cierto que una obra nace en un espacio y tiempo determinados, también es cierto que sólo se vuelve inteligible en un espacio y tiempo determinados y no sólo en aquellos que la vieron nacer.

Por tanto, la Filosofía tiene un deber con los textos clásicos, como sentimiento de reconocimiento de una deuda: “La deuda no es simplemente un hecho económico (débito, que debería) o sociales - (Obligatio, una relación de obligación), sino una realidad antropológica fundamental que designa la situación primaria del hombre en relación con el otro y con el tiempo. La deuda es, de hecho, inseparable de la cuestión de los orígenes. […] es reconocer que el hombre no puede convertirse él solo en su propio creador[…]. Esta dependencia estructural [puede] dar lugar a la confianza (crédito, el don) y al apoyo (responsabilidad y solidaridad)”.[iii]

La deuda nos hace herederos, guardando la memoria de nuestros orígenes y la constitución de su recepción; al no ser unitario, el origen es lacunar y, por tanto, debe interpretarse en cada generación. Al respecto, Marilena Chaui observa: “Al instituir lo nuevo sobre lo sedimentado en la cultura, [la filosofía] reabre el tiempo y forma el futuro, […] cuando el presente es aprehendido como aquello que nos exige trabajo [… ], de tal manera que seamos capaces de elevar al plano [de la experiencia], […] una pregunta, cuestión, problema, dificultad”.[iv]

Si la Filosofía y su Historia son cuestionadas hoy, es en el horizonte de la crisis antigenealógica contemporánea, que disipa todas las pertenencias tradicionales, culturales y morales. Benjamin escribe: “Nos empobrecimos. Uno tras otro, fuimos abandonando todas las piezas del patrimonio humano, tuvimos que dejar este tesoro en la casa de empeño, muchas veces a una centésima parte de su valor, a cambio de la moneda del 'actual'”.[V]

Que se piense en Ilíada, primera obra escrita en Occidente, cuyo origen es incierto, así como su autoría. Homero habría reunido versos y narraciones de diferentes orígenes espaciales y temporales, siendo él mismo griego, pero de Asia. Menor. Así, la literatura escrita en Occidente tiene su origen en Oriente; En él se mezclaban tradiciones orientales y occidentales, palabras de origen semítico y griego. En ese sentido, observa, a su vez, Leda Tenório da Motta: “las obras creativas se revelan en referencia unas a otras[…]. Racine ni siquiera habría entendido a alguien que le negara el título de poeta francés por buscar temas griegos y latinos. Creo que Shakespeare se habría asombrado si lo hubieran querido limitar a temas ingleses, y si le hubieran dicho que, como inglés, no tenía derecho a escribir Hamlet, con tema escandinavo, o Macbeth, con tema escocés. .[VI]

Esto nos lleva de nuevo a Sócrates, para quien la filosofía es un cosmopolitismo generoso, sin hogar de todos los que usan la palabra. En este libre movimiento de Logos se forma la capacidad de pensar por uno mismo y de aprehender una época en el pensamiento. La filosofía organiza lo que vivimos de manera dispersa en la vida cotidiana y en la historia, contribuyendo a la inteligibilidad del mundo.

En este sentido, el paso del tema “universal” al de las identidades locales trae de vuelta la disputa decimonónica entre el romanticismo y la Ilustración, valorando el primero cada cultura en sí misma, considerándola en su integridad, valores y tradiciones –con lo que el contacto con otras culturas sería una amenaza a su identidad, tendiendo así al cierre cultural. En cuanto a la Ilustración, con su pasión por los viajes y sus valores universalistas abstractos, creó un cosmopolitismo egocéntrico.

Pero si se piensa en el mito fundacional de Europa[Vii] y sobre el tema del viaje, que lleva a la frecuentación de otros pueblos, paisajes y costumbres, a ver tantas naciones y diversidad, que hizo posible que Montaigne, Montesquieu y Lévi-Strauss buscaran y reconocieran lo que les es común: “Lévi-Strauss podría hablar con justicia de una 'mirada lejana' para calificar la actitud desprendida del pensador que, excéntrico, dirige su mirada hacia lo universal”.[Viii]

En efecto, al reflexionar sobre el particularismo de las culturas de las llamadas tribus primitivas, Lévi-Strauss escribe: “La humanidad se detiene en las fronteras de la tribu, del grupo lingüístico, a veces incluso de la aldea, y hasta tal punto que una gran número de poblaciones llamadas primitivas se designan a sí mismas con un nombre que significa 'los hombres', a veces 'los buenos', los 'excelentes', los 'completos', lo que implica que otras tribus, grupos o aldeas no participan en las virtudes o incluso de la naturaleza humana, pero que además están formados por 'malos', por 'monos de tierra'. A menudo acaba privando al extranjero de este último grado de realidad, convirtiéndolo en un 'fantasma' o una 'aparición'”.[Ex] Y “Banto”, en lengua africana subsahariana, significa precisamente “Humanidad”.

En el horizonte de la crítica del colonialismo y de la antropología que lo acompañaba, Lévi-Strauss identificó en la etnología un dilema según el cual o el etnólogo queda atrapado en el pensamiento de su comunidad científica, y el indígena sería sólo objeto de su curiosidad analítica, o eso vincula a sociedades exóticas (exóticos, extranjeros) hasta el punto de identificarse con ellos- y entonces su mirada se confunde porque se aparta de su propia cultura: “Lévi-Strauss no se arriesgó a una respuesta definitiva, porque, al mismo tiempo que escribía que la etnología se fundaba en exorcizar 'el crimen de destrucción' del Nuevo Mundo[X] – y así la vida del etnólogo sería un largo arrepentimiento –, también admitió que la civilización occidental no sería la única culpable, 'la sociedad azteca habiendo tenido una obsesión maníaca y en ese carácter excesiva' de sangre y tortura” .[Xi]

El anticolonialismo en general identifica el colonialismo y la raza blanca, fusionando la política de Estado y la sociedad, identificando el colonialismo en todas las culturas europeas y occidentales, generalización que es característica de la formación de prejuicios.[Xii] Así, la Universidad de Princeton, en 1990, decidió suprimir la unidad curricular “Cultura occidental”, sustituyéndola por “Cultura, ideas y valores”: “[esta nueva disciplina] entendía [la sustitución de obras clásicas por feministas recientes, al tratar con culturas africanas, hispanas, asiáticas e indígenas. el ejemplo de Estudios culturales que se generalizó, destaca el cambio de rumbo de la cultura occidental[…]. [la disciplina Estudios culturales] ya no está abierta a otras culturas, como lo estaba la antropología, se pierde[…]. A escuela de apertura, que pretendía abrir la cultura a todos los comportamientos ya todas las ideologías, se ha convertido en una caricatura de la verdadera apertura: 'lo que se anunciaba como una gran apertura es en realidad un gran cierre'”.[Xiii]

Por lo tanto, hay una filosofía en Brasil y esta, como la literatura y las humanidades en general, es un conocimiento transdisciplinario y supranacional. Para ellos, las fronteras no son frentes, lugar de choques, choques y conflictos, sino pasajes que traducen Filosofía, culturas y modos de vida. Como observó Benjamin sobre la traducción, la Filosofía en Brasil, como la literatura, las artes, las Humanidades, no es la duplicación de un “original”, ya que la traducción trae ejes de comprensión inéditos, la cultura extranjera enriquece tanto la lengua como la cultura de origen. , así como la lengua y la cultura a la que se traduce, en un “espacio lúdico” de invención.

Porque esta circulación de ideas y palabras hace que el original sobreviva en el tiempo, no es sólo un Überleben, una continuidad, Post mortem, más allá de la vida, pero sobre todo un fortleben, una continuación de la vida del original en el cuerpo lingüístico de la traducción, el prefijo “fuerteindicando, precisamente, una distancia del original del que la obra sigue viviendo, transformándose.[Xiv] No se trata, por tanto, de anular las huellas de distanciamiento entre filosofías de diferentes culturas, sino de reconocer la naturaleza de la Filosofía como deshacedora de toda identidad sedentaria y de toda isoglosia aislacionista.

* Olgaría Matos es profesor de filosofía en la Unifesp. Autor, entre otros libros, de Palíndromos filosóficos: entre el mito y la historia (Unifesp)

Notas

[i] Cf. en particular Nobre, Marcos, José Marcio Rego (eds.). Conversaciones con filósofos brasileños, São Paulo, Ed. 34, 2000, entre otros. Cf. también la entrevista a Denison Cordeiro, “A Arte da Aula”, en Revista Sísifo, http://www.revistasisifo.com/2015/05/a-arte-da-aula-entrevista-com-denilson_2.html.

[ii] Chaui, Marilena. Brasil: mito fundacional y sociedad autoritaria. São Paulo: Fundação Perseu Abramo, 2000, p 12. Está la Filosofía y el análisis filosófico de todas las cuestiones, como en los trabajos de Marilena Chauí sobre Espinosa y Merleau-Ponty, entre otros, pero también en sus reflexiones sobre Brasil y sus mitos, el la temporalidad de Boteco y el ocio de las clases populares, para quienes, lejos de una “pobreza” cultural, el tiempo no tiene el mismo significado que para Benjamin Franklin; o su presentación en la portada de un disco de Dolores Durand, en cuya lírica Marilena redescubre a Rilke y el tema del amor y la despedida incesante. O su concepción de la cultura y la educación. En la mejor tradición socrática y de Merleau-Ponty, Marilena fue secretaria de cultura de la Ciudad de São Paulo. La filosofía es “hija de la ciudad”, se desarrolla entre la plaza pública y la soledad de la subjetividad y la escritura.

[iii] Véase Sarthou-Lajus, Nathalie, Elogio de la Dette. París, PUF, 2012, pág. 10-11.

[iv] Chaui, Marilena, “La universidad pública en una nueva perspectiva. En: Revista Brasileña de Educación, Sep/Oct/Nov/Dic 2003 No 24, p 12. Aquí adaptamos el tema de la educación al de la experiencia en términos benjaminianos.

[V] Benjamin, W., “Experiencia y Pobreza”, en Trabajos seleccionados yo, trans. Sergio Paulo Rouanet. São Paulo, Brasiliense, 2008, p.119, traducción modificada.

[VI] Leda T., ídem pág. 9.

[Vii] Algunos derivan el término Europa del radical “ops”, “la mirada” y “opsis”, “el hecho de ver” que se encuentran en la palabra “óptica” Relacionadas con los ojos, estas palabras se asocian con el rostro, el aspecto, la acción de ver de la que derivan idea y la palabra idea que conecta con historia, el que sabe, el historiador que supo ver, el “testigo ocular”. Eur., está presente en el adjetivo euros – “una vasta extensión”, una palabra poética para el cielo, la tierra y el mar. euro + ups = la mujer de cara ancha, de mirada ancha. O entonces europeo viene del hebreo ereb, el lugar donde se pone el sol, es decir, el Oeste, mientras que el término Asia vendría de Asu, el amanecer. Para un asiático, en efecto, el sol se pone en Europa, en las tierras situadas en Occidente: “Europa, la princesa asiática y no europea, desde que fue raptada en Fenicia, moriría en Creta […]. Europa toma su nombre no de una princesa indígena [...], lo que sugiere que no encuentra su identidad en sí misma [...] La Crisis de l'Esprit, Obras I. París, Gallimard, 1957, p. 995.

[Viii] Mattei, Jean François. Le Procès de l'Europe. París, PUF, 2011, pág. 124-125.

[Ex] Cf. Levi Strauss. Carrera e Historia. París, Denoël-Gonthier, 1968, p.19-22.

[X] “La historia es una larga secuencia de colonizaciones y, por lo tanto, de mestizaje de pueblos por pueblos más poderosos que usaron y abusaron de su poder, pero también […] la introducción de formas de vida, religiones y organizaciones políticas […]. ] tierras fueron ocupadas durante siglos por los fenicios, romanos, vándalos, bizantinos, luego los árabes que impusieron su lengua y religión a las tribus bereberes, luego los españoles que ocuparon Orán en 1509, y finalmente los otomanos que expulsaron a los españoles en 1555 a imponer dos siglos de dominación.” (Mattéi, op cit, p. 163-164).

[Xi] Levi Strauss. El pensamiento salvaje. París, Plon, 1985, pág. 466. Sobre la ideología anticolonial, Mattéi escribe: “Así, se silencia el comercio de esclavos organizado durante siglos por los propios africanos en beneficio de los árabes y europeos. Se olvida, por un lado, que el comercio de esclavos europeo duró menos tiempo que el de los árabes y turcos; y que fueron los europeos quienes pusieron fin a este tráfico, quienes prohibieron[…] la esclavitud en todo el mundo”. (Mattei, op cit. P171-172.).

[Xii] Cuestionó los principios del patrimonio cultural en Occidente en su Hombres europeos blancos muertos, Susan Sontag escribió: “La verdad es que Mozart, Pascal, el álgebra de Boole, Shakespeare, el régimen parlamentario, las iglesias barrocas, Newton, la emancipación de la mujer, Kant, Marx, los ballets de Balanchine, no compensan lo que esta civilización particular ha derramado sobre el mundo. Es la raza blanca y solo ella -sus ideologías e invenciones- la que erradica en todas partes las civilizaciones autónomas, la que ha trastornado el equilibrio ecológico del planeta y la que ahora amenaza la vida misma” (Sontag, S. What´s going in America? .in : revista partidista, vol. 34, pág. 57, 1967).

[Xiii] Allan Bloon, apud Mattei, pág. 177. Recordad también la herencia cristiana de Occidente y su universalismo en la Epístola a los Colosenses: «Ya no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, ya no hay bárbaro, ni escita, ni esclavo, ni libre, sino Cristo que es todo y está en todo”. (Cf. Pablo, Epístola a los Gálatas 3, 28 y a los Colosenses, 3, 11).

[Xiv]  Benjamin, “La tarea del traductor”, p. 107, traducción modificada.

 

Ver todos los artículos de

10 LO MÁS LEÍDO EN LOS ÚLTIMOS 7 DÍAS

Ver todos los artículos de

BUSQUEDA

Buscar

Temas

NUEVAS PUBLICACIONES

Suscríbete a nuestro boletín de noticias!
Recibe un resumen de artículos

directo a tu correo electrónico!