por GILSON SCHWARTZ*
Respuesta al artículo de Eleutério Prado.
En mi comentario a revisión escrito por Eleutério FS Prado del libro el valor de todo, de Mariana Mazzucato – publicado en el sitio web la tierra es redonda - Recordé responder de Roberto Schwarz a Gerard Lébrun. En definitiva, hay quienes critican a los demás por rasgos de pensamiento que asumen en la práctica. ¿Y no es que Prado repite la misma actitud en su iracunda respuesta?
Por afirmar (para aquellos que "tienen la paciencia adicional de leer el artículo de Schwartz") que construí mi texto "como una crítica ad hominem a Eleutério Prado", decide nuestro crítico de economía política, socialista democrático, a invertir desenfrenadamente por los caminos de la crítica "ad hominem". Dice avergonzarse de participar en un debate inútil y me ataca en innumerables ocasiones (los que me conocen saben que me considero “un gran intelectual”, está claro que no he leído el libro de Mazzucato, no he atacado la teoría de Prado valor…o incluso que me “perfilo” junto a “grandes colaboraciones”, tratándome irónicamente como un “gran crítico”…). ¡Ser paciente! Vergüenza ajena.
Me limito a reforzar el error ya señalado, que Prado confirma en su bochornosa anticrítica. Pues dice que mi sugerencia de que Prado confunde a Mazzucato con la “rama norteamericana de la ideología francesa” es falsa.
Prado dice que su nota “simplemente dice que está en el campo de la posmodernidad porque trata explícitamente el tema del valor en la economía como una cuestión narrativa”. Ahora, y por causa! Después de releer su precipitada y descortés respuesta, esa fue la única y suficiente demostración de que Prado no sabe de lo que habla.
Entonces, explico (escudado en la disección de la Ideología francesa trabajada por Paulo Eduardo Arantes): esta Ideología es, precisamente, el desplazamiento de cuestiones sustantivas de la economía política y la filosofía contemporánea al ámbito estructuralista y postestructuralista de las narrativas, discursos, de juegos de espejos en los que lo real se desintegra en los desvanes subjetivistas de lo imaginario y lo simbólico.
Al exigirle a Mazzucato una teoría del valor que no se base en la perspectiva subjetiva del valor de uso, Prado rechaza la construcción sustantiva de una alternativa en el capitalismo en la que el Estado allana el camino (en su perspectiva marxista, “científica”) para una sociedad socialista. futuro democrático (a mí me parece más una utopía neoliberal marxista, en la que la lucha de clases llevaría de la barbarie a un nuevo orden socialista democrático sin pasar por las dinámicas comunicacionales e intersubjetivas que constituirían una nueva economía y una nueva política que son legítimas y sostenible).
Es muy simple, Prado no entendió que “posmodernismo” e ideología francesa son lo mismo. Así que le sugiero que lea los llamados "gigantes" y venga al debate, sin vergüenza.
* Gilson Schwartz Es profesor de la Escuela de Comunicaciones y Artes (ECA) y del Programa Interdisciplinario de Posgrado Humanidades, Derechos y Otras Legitimidades de la FFLCH de la Universidad de São Paulo (USP).